El vídeo que os adjunto me ha parecido muy emotivo. La vida es una escuela constante, y hay que estar con los cinco sentidos alerta para aprender todo lo que tiene que enseñarnos. Desde el colegio, durante la infancia, y en los distintos ámbitos en los que posteriormente nos desenvolvemos, ya sean académicos, laborales, familiares, políticos o sociales. Siempre con actitud de perfeccionamiento y de superación personal.
http://www.youtube.com/watch?v=l8WKbDf6y64&sns=fb
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Yo, además, aprendí que nunca es tarde para seguir aprendiendo, que puedo sumar experiencias, restar rencores, multiplicar esfuerzos y dividir un mar de lágrimas hasta que quepa en un cuentagotas.
A leer en noches de luna llena y a escribir el nombre de los que quiero en las paredes de mi casita de papel. A hilvanar historias de princesas que entonan bellas melodías desde el balcón de una página del libro de las fantasías, y a saltar los obstáculos del camino con mis botas de siete leguas.
A entornar mis ojos mientras levanto una plegaria al infinito, y a recorrer el mundo en la cestita de un globo. A repartir cariño envuelto en abrazos de regalo, y a compartir sonrisas.
Aprendí a aceptar que soy prescindible, y que la felicidad es puntual y no espera a nadie. Que ahora es el momento, porque el mañana no ha asegurado su presencia.
Aprender, aquí y ahora.
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